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Personal centinela del Centro de Detención Preventiva o Cárcel de Yumbel incautó una serie de elementos prohibidos. Estos, presumiblemente serían empleados para perpetrar una fuga desde el penal. Se trata de un revolver a fogueo adaptado para percutar, 3 municiones calibre 22, cannabis sativa y una nota con el nombre del destinatario.

La información fue confirmada por el alcaide del CDP Yumbel, capitán Gabriel Cheuquén. La autoridad explicó que las especies prohibidas fueron lanzadas desde el exterior envueltas en una superficie de látex. Esta estaba compactada con cinta de embalar y se logró que no llegara a manos de la población penal.

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“La oportuna reacción del personal centinela permitió desbaratar un plan que buscaba evadir la seguridad del penal con uso de armamento, lo que es un hecho grave. Por eso nuestra labor no cesa y tiene su foco en la seguridad pública”, acentuó el oficial.

Cheuquén detalló que la nota consignaba el nombre Jaime y partir de indagaciones preliminares se estableció que coincidiría con un interno imputado por el delito de homicidio en el Tribunal de Garantía de Los Ángeles, quien estaría a cargo de perpetrar la fuga junto a otro interno apodado el “Talo”.

Los detalles del hecho son investigados por la administración penitenciaria en colaboración con la Brigada de Homicidios de la PDI que acudió al sitio del suceso por Instrucción del Ministerio Público para levantar registro de cámaras e interrogar a eventuales sospechosos a partir de la evidencia.

La Carta

El texto encontrado junto al arma señala:

  • «Ya mi hermano Jaime, aquí va lo que hablamos. Atento a la fuga, que todo salga bien no más mano, trata de sacar al Chalo igual que los sirve pa tenerlos a los dos bro. Por el lado de la cancha, le daremos color a la misma hora en el puro pecho al de la garita y le ponen rapidez. Que salga todo bien compañero Castaña».

Operativo en la cárcel de Yumbel

El interno aludido, de iniciales JOM y GIS, ambos identificados en la carta e investigados por la relación de hechos existente, fueron trasladados al Complejo Penitenciario Concepción como medida de seguridad, instruida por el mando regional, quien se constituyó en el sitio del suceso para verificar los detalles del hecho.

Una vez ahí, dirigió un registro y allanamiento extra ordinario en los módulos de los imputados, que permitió requisar drogas y teléfonos celulares.