Hay veces donde la realidad supera la ficción, como el caso de esta abuelita que voló gratis por más de 20 años. Se trata de Marilyn Hartman, una anciana de 69 años que logró engañar a las autoridades y realizar decenas de viajes, incluso internacionales.
Se calcula que logró concretar más de 30 vueltos colándose en los embarques. Si carisma particular, hizo que los trabajadores de las aerolíneas no le pidieran su boleto, tras lo cual ingresaba al avión y ocupaba algún asiento desocupado.
Lo más curioso es que con esa misma simpatía, si era descubierta, pedía disculpas, se iba y al otro día lo volvía a intentar.
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CÓMO LA ABUELITA VOLÓ GRATIS
Su aventura se inició en el año 2002, cuando decidió probar suerte intentando ser amable con la tripulación. Llegó a la sala de embarque y al abordar, logró que la hicieran pasar sin mayores preguntas.
Según su propio relato, «la primera vez que pude pasar, volé desde Chicago a Copenhague. La segunda vez volé a Paris».
Sus pasos fueron conocidos en aeropuertos de Estados Unidos y Europa, e incluso una vez fue arrestada, pero dejada en libertad. Una vez más su carisma lograba empatía con los tribunales.
Sin embargo, ahora tendrá que enfrentar cargos por un delito grave, tras ser detenida en un aeropuerto de Chicago en el mes de marzo.
SU DEFENSA
Si bien, es su comportamiento es ilícito, la mujer se defiende de lo ocurrido con un simple argumento. “Lo que tengo que decir es que nunca he podido subirme a un avión sola. Siempre me dejaron pasar».
Agregó que «me refiero a que pude pasar por las líneas de seguridad sin una tarjeta de embarque”.
Un experto en seguridad aeronáutica, Jeff Price, señaló al diario Británico Daily Mail, «que ella pueda repetir eso una y otra vez, es simplemente alucinante».
«La genialidad de su modo de operación está en su simplicidad. Son los tipos de planes poco sofisticados que suelen ser los más exitosos», añadió.
Finalmente, la abuelita, argumento que «Soy bipolar. Y esto es algo que he rechazado durante años. Cuando tomé el avión, no estaba feliz”.*