Comenzó marzo, un mes de muchos gastos para la gran mayoría de las familias chilenas. Matrículas de colegios y universidades, permisos de circulación, útiles escolares y uniformes, transporte escolar y pago de las vacaciones, están entre las innumerables cosas que hay que pagar. 

Este escenario se transforma aún más difícil para algunos, ya que por el estallido social hubo personas que recibieron menores ingresos debido a las paralizaciones, vieron cómo sus lugares de trabajo fueron destruidos por los desmanes o incluso perdieron su fuente laboral.

En ese contexto, ¿qué pasos se sugieren seguir para sobrevivir a este complejo mes? MiPlusvalia.cl, entrega 3 recomendaciones para aquel que necesite ordenar sus finanzas.

1.- Enumerar los gastos del periodo. 

El gran error de las personas es no organizarse para enfrentar obligaciones financieras. Es importante enumerar todas las deudas y gastos del periodo y ponerlos por orden de prioridad, con el fin de calcular el monto completo y evaluar posibilidades de aplazamiento en algunos casos. Ello, por supuesto, se podría evitar si no se gastara más de lo que se tiene en ingresos, pero es sabido que en Chile tenemos un grave problema de educación financiera, que trae consigo altos niveles de endeudamiento que no son sostenibles en el tiempo. 

2.- Conocer las opciones de financiamiento.

Una vez que ya se planificó un plan de acción en cuanto a los gastos, es vital informarse acerca de las distintas opciones para obtener recursos. En Chile hay diferentes tipos de financiamiento y elegir cuál es el más adecuado va a depender de cada caso, de las características del solicitante, el nivel de flujos y capacidad de pago que tiene a corto o largo plazo, su historial crediticio, etc. Lo importante es cotizar de acuerdo a las necesidades y las características individuales de cada uno proyectando incluso posibles imprevistos. En este punto, no hay que olvidar considerar la Carga Anual Equivalente “CAE” de los créditos, lo ideal es optar por el menor.

 3.- Adquirir sólo buenas deudas.

 Hay algunos créditos que se justifican por si solos en el largo plazo, como los hipotecarios, pues la inversión en bienes raíces se beneficia de la plusvalía asociada a la propiedad. Es decir, ésta tiende a aumentar su valor en el largo plazo, aumentando el patrimonio (ahorro) de su propietario. Sin embargo, hay otro tipo de obligaciones que no debiese ser parte del día a día cuando el bolsillo no lo permite. Por ello, se sugiere no endeudarse para comprar bienes de consumo suntuario, como autos, viajes y ropa.