En virtud de que no hay evidencia científica que avale los túneles sanitizadores y que no se pueden utilizar en personas desinfectantes que estén autorizados para utilización en objetos inertes, la Seremi de Salud del Biobío prohibirá su uso en personas, autorizándolos sólo para vehículos, implementos o superficies inertes y previa fiscalización.

Lo anterior, en virtud de Ord. 1313 de fecha 20 de abril de la Subsecretaría de Salud Pública, que establece que pese a la baja toxicidad de algunos desinfectantes, éstos están diseñados para ser aplicados sobre superficies y no sobre personas, ya que pueden tener características de irritantes; además de indicar que la “desinfección de personas” no está regulada en la normativa sanitaria.

“En virtud de que los desinfectantes no están diseñados para ser aplicados sobre personas debido a que pueden tener características irritantes y a que la desinfección de personas no está regulada, ésta Autoridad Sanitaria no aceptará proyectos de sistemas que utilicen desinfectantes para ser aplicado a las personas, cualquiera sea la forma de aplicación o naturaleza de la sustancia usada, y sólo evaluará autorizar su aplicación a vehículos, implementos o superficies inertes, previo a fiscalización de nuestra área técnica”, declaró el Seremi de Salud del Biobío, Héctor Muñoz.

Esa fiscalización previa se realizará en base al D.S. 157/05, que establece como requisito que los desinfectantes deben contar con registro del Instituto de Salud Pública previo a su uso; debiendo considerar además que los desinfectantes de venta especializada deben ser aplicados por empresas creadas para dicho fin. 

Es importante indicar que actualmente el Ministerio se encuentra analizando una propuesta de reglamento específico para productos con acción antimicrobiana, con el objetivo de independizarlas del actual reglamento (D.S. 157/07), estableciendo condiciones específicas para este tipo de productos.

Las medidas de higiene que ha mencionado el Ministerio de Salud, son hasta ahora las únicas sanitariamente efectivas para la prevención del Covid-19, y la aplicación de desinfectante, además de poder producir un efecto irritante puede generar una falsa seguridad de estar protegido del contagio.