Biobío se prepara para una temporada crítica de incendios forestales, con un despliegue estratégico que incluye tecnología avanzada, brigadas terrestres y una poderosa flota aérea, destacando el apoyo del avión Hércules C-130.
En medio del inicio de la temporada de incendios forestales, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) ha intensificado sus esfuerzos para enfrentar las llamas en la región del Biobío, donde 11 comunas han sido identificadas como prioritarias bajo el “botón rojo”.
Aida Baldini, directora ejecutiva de CONAF, subrayó la importancia de una gestión eficiente de los recursos en áreas críticas. Y también enfatizó en la importancia de mantener un trabajo continuo y apoyado con diversas instituciones.
“Pese a que decimos 11 comunas con botón rojo, nosotros hemos profundizado muchísimo más en la tecnología que nos permite saber en qué áreas, en qué cuenca de la comuna, tenemos los mayores problemas”, explicó Baldini.
Agregando que “esto no solo nos indica la vegetación en riesgo, sino que nos permite atraer recursos de combate y mantenerlos cerca de las zonas más vulnerables”.
Prioridades claras en la lucha contra el fuego en los incendios
La directora destacó que las prioridades de CONAF se enfocan en proteger vidas humanas, viviendas, áreas protegidas e infraestructura crítica. “Ya tenemos nuestras brigadas en standby en puntos estratégicos para responder rápidamente en caso de un incendio”, aseguró.
En el ámbito aéreo, el despliegue de CONAF incluye helicópteros livianos, un helicóptero Súper Puma y el apoyo del avión Hércules C-130, pieza clave en las operaciones de alto impacto. El Súper Puma, que puede transportar hasta 11 brigadistas y cargar 1.500 litros de agua por descarga, permitirá una respuesta más ágil y efectiva.
Por su parte, el Hércules C-130, conocido por su capacidad para combatir incendios a gran escala, está listo para actuar en coordinación con el resto de las aeronaves de CONAF.
Este recurso, que ya ha demostrado su eficacia en temporadas anteriores, complementará las operaciones en terrenos de difícil acceso y con grandes extensiones afectadas.
Tecnología como aliada estratégica
El uso de herramientas tecnológicas avanzadas ha sido clave para identificar las áreas de mayor riesgo, lo que permite un despliegue más eficiente de recursos.
Este enfoque, combinado con la preparación de brigadistas y la infraestructura logística, busca minimizar los impactos de una temporada que se anticipa compleja debido a las condiciones climáticas y el aumento de material combustible.
CONAF hace un llamado a la comunidad para colaborar en la prevención, evitando actividades que puedan desencadenar incendios y reportando cualquier situación sospechosa.
En donde la coordinación entre autoridades, brigadistas y tecnología de vanguardia se consolida como la principal estrategia para proteger los recursos naturales y la seguridad de la región del Biobío.
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