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El intendente de la región del Biobío, Sergio Giacaman, se refirió a la situación de los funcionarios que fueron sorprendidos infringiendo el toque de queda en Hualpén, mientras se trasladaban en un vehículo con cajas de alimentos para familias afectadas por la pandemia.

La situación reviste mayor gravedad, toda vez que el funcionario público que conducía el vehículo tenía signos de haber consumido alcohol y se negó a someterse al alcohotest, según la versión policial.

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En este contexto, la máxima autoridad regional dijo haber gestionado personalmente el despido de los involucrados, debido a la gravedad de lo ocurrido.

«Hemos insistentemente pedido que se cumpla el toque de queda, porque es una medida que está pensada desde el punto de vista sanitario y desde luego si un funcionario público no la cumple tiene que recibir las sanciones que corresponde, en el caso de ambos -yo he conversado con los ministerios respectivos para solicitar que sean cesados de sus funciones», aseveró el intendente.

En paralelo, los funcionarios detenidos serán investigados por los tribunales ordinarios y además sometidos a un proceso sumario, agregó Giacaman.

«De igual manera se va a iniciar un proceso de sumario para poder identificar la situación en la que se encontraban y también saber qué andaban haciendo a esa hora incumpliendo las restricciones colectivas que tenemos todos los ciudadanos… es deber nuestro como autoridades velar por el cumplimiento de la normativa y también ser idealmente un ejemplo para la ciudadanía», apuntó.