Durante la noche del martes 25 de febrero, el toque de queda implementado en la Región del Biobío, a raíz del masivo apagón que afectó al país, dejó un saldo de 33 personas detenidas. La medida buscó resguardar la seguridad de la población en medio de la contingencia.
La mañana del miércoles 26, las autoridades analizaron la aplicación de la restricción en un Comité para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid) en Concepción. En la instancia, se evaluó el despliegue de personal y el cumplimiento de la normativa.
El jefe de Defensa Nacional en la región, contralmirante Arturo Oxley Lizana, informó que se movilizaron 840 efectivos de las Fuerzas Armadas y cerca de 500 policías para garantizar el orden público.
Oxley precisó que 31 de los detenidos fueron aprehendidos por Carabineros y dos por la Policía de Investigaciones. “Hay siete que, durante el control del toque de queda, además de vulnerarlo, tenían otro tipo de situaciones por las cuales quedaron detenidos”, indicó.
Además, se entregaron 124 salvoconductos de manera presencial para quienes justificaron su desplazamiento. Las autoridades destacaron la labor coordinada entre Fuerzas Armadas, Carabineros, Bomberos y municipios para enfrentar la emergencia.
