La reciente encuesta Cadem de la primera semana de octubre de 2024 reveló que la aprobación del presidente Gabriel Boric se sitúa en un 34%, mientras que su desaprobación alcanzó el 57%. Estos resultados reflejan un incremento en la desaprobación de su gestión, marcada por desafíos en el ámbito político y social del país.
La encuesta entrevistó a 702 personas a través de encuestas telefónicas y muestra un panorama complejo para el mandatario. Además, el estudio reporta un margen de error del 3,7% y una confianza del 95%, lo que permite interpretar estos datos como representativos del sentir general de la ciudadanía.
Principales desafíos en el horizonte para Boric
El desplome en la aprobación presidencial coincide con diversos eventos políticos recientes, como el debate en torno a las reformas judiciales y políticas que buscan fortalecer la colaboración entre el Gobierno y el Congreso, además de reducir la cantidad de parlamentarios, una de las reformas más respaldadas por la ciudadanía según la encuesta. Un 62% de los encuestados considera que la reducción del número de parlamentarios es una de las medidas más urgentes para mejorar el sistema político.
Otro factor clave en la percepción negativa hacia el Gobierno son los problemas relacionados con la seguridad pública. El 57% de los encuestados considera prioritario corregir la reforma procesal penal para mejorar la seguridad, lo que muestra una creciente preocupación por este tema entre los ciudadanos.
El impacto en la imagen de los partidos políticos
Por otra parte, la imagen de los partidos políticos sigue siendo negativa en gran parte de la población. La encuesta revela que solo un 30% tiene una buena o muy buena imagen del Partido Socialista, mientras que el Partido Republicano, de reciente ascenso, es visto de manera positiva por un 36% de los encuestados. En contraste, partidos tradicionales como la UDI y Renovación Nacional siguen enfrentando una imagen negativa entre los votantes.
Perspectivas de la economía y el futuro del país
En cuanto a la situación económica, los chilenos no son optimistas. El 60% de los encuestados considera que la economía está estancada o en retroceso, lo que refleja una incertidumbre generalizada sobre el futuro económico del país. A esto se suma que sólo un 25% califica de buena o muy buena la situación económica de las empresas, un descenso respecto a meses anteriores.
Con una baja en la percepción de la economía y un creciente malestar en torno a la gestión del Gobierno, el presidente Boric enfrenta uno de sus momentos más críticos desde que asumió el cargo. La confianza en el futuro del país también ha disminuido, con un 48% de los encuestados sintiéndose pesimistas o muy pesimistas sobre lo que vendrá en los próximos meses.
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