Una misiva entregada por la subsecretaría de Salud Pública en relación a trabajadores contagiados de coronavirus ha generado una gran polémica en el Congreso.
El documento, que está firmado por Paula Daza, detalla que aquellos empleados contagiados de covid o que fueron catalogados como contacto estrecho puedan ‘negociar’ con su empleador continuar trabajando, vía teletrabajo y sin sacar licencia médica.
«Los trabajadores que han sido catalogados por la Autoridad Sanitaria como contacto estrecho, pueden de común acuerdo con su empleador, optar por continuar trabajando a distancia, sin la necesidad de requerir licencia médica; compatibilizando de esta forma la continuidad laboral y su aislamiento en periodo de cuarentena», detalla la carta, cuya fecha de emisión es el 19 de marzo.
Además, también se extiende esta posibilidad para quienes se hayan contagiado del Covid-19 ‘siempre y cuando la condición de salud lo permita y por lo tanto, sin necesidad de solicitar licencia médica para el periodo de aislamiento’.
El documento finaliza remarcando que «lo anterior, no exime la responsabilidad del trabajador de cumplir con el aislamiento que la autoridad sanitaria estableció para su condición».
Desde el Frente Amplio anunciaron que acudirán a la Contraloría General de la República, remarcando que «no aceptaremos que los trabajadores y trabajadoras sigan cargando con más responsabilidad sobre sus vidas y la crisis. Las licencias médicas son un derecho, no son parte de una «negociación» con el empleador».
Por su parte, la candidata a la Gobernación de la Región Metropolitana, Karina Oliva, indicó que «Las Isapres tuvieron utilidades por $82.548 millones en el 2020 y el Gobierno invita a las y los trabajadores a “negociar” con el empleador su licencia médica por COVID-19. ¡Todo para que la Isapres no paguen la licencia! Eso del Gobierno de los Infelices se quedó corto».
