Santa Bárbara

Un violento robo afectó a un colegio, en un sector rural de Santa Bárbara, dejando pérdidas millonarias y un profundo impacto en la comunidad educativa por el actuar de los delincuentes.

El hecho quedó al descubierto cerca de las 07:45 horas de este lunes, cuando los docentes de la Escuela Corcovado llegaron al recinto ubicado en la Ruta Q-625, kilómetro 3,5, y se encontraron con un escenario devastador. Desconocidos habían forzado los candados del portón de la reja perimetral. Para luego recorrer cada una de las dependencias del colegio, sustrayendo prácticamente todo lo que encontraron a su paso.

Los antisociales se llevaron dieciséis tablets de la marca Learn, además de otras de marcas Ita y Dav; computadores portátiles de diferentes gamas, incluyendo notebooks Asus, Lenovo y HP. Además de un televisor LG de 50 pulgadas, un proyector Epson y un par de parlantes de la marca Mlab.

También sustrajeron con un generador eléctrico de 420 cc de la marca Ingco y, sin reparo alguno, ingresaron a la cocina del establecimiento para sustraer utensilios y elementos necesarios para la alimentación de los estudiantes. El nivel de saqueo fue tal que incluso algunos equipos quedaron dañados en el camino, como una impresora que los delincuentes habrían dejado botada.

Alcalde de Santa Bárbara «un atentado contra la educación»

En este sentido, el alcalde de Santa Bárbara, Cristian Osses, expresó su indignación y dolor por lo ocurrido, calificando el hecho como “un atentado contra la educación”. “Hoy nos dejaron desnudos y sin palabras, porque se llevaron desde la tecnología que usan nuestros niños para aprender hasta los utensilios de cocina que permiten su alimentación. Es impresentable que delincuentes actúen con tal nivel de maldad y sin la más mínima consideración, dañando a los que más lo necesitan”, sostuvo la autoridad.

Osses también hizo un llamado a la comunidad a no comprar especies robadas. “Pedimos a nuestros vecinos y vecinas que no adquieran computadores, tablets o implementos de dudosa procedencia. La receptación es un delito y necesitamos de la ayuda de todos para frenar estos actos que privan a nuestros jóvenes de su derecho a la educación”, señaló con evidente molestia.

Carabineros se encuentra desarrollando diligencias para dar con el paradero de los responsables, y poder recuperar las especies. Mientras la comunidad escolar de Corcovado enfrenta el duro golpe de haber perdido prácticamente todos sus recursos tecnológicos y básicos para el funcionamiento diario del establecimiento.

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