Un nuevo acto de violencia ocurrió la noche de este viernes en la región de La Araucanía, donde un grupo incendió vehículos y disparó contra una vivienda, afortunadamente sin dejar personas lesionadas.


El hecho sucedió a eso de las 23:00 horas, cuando un grupo de individuos encapuchados llegó hasta donde se encontraba una empresa, en la localidad de Pidima, comuna de Ercilla.


Ahí procedieron a prender fuego a una retroexcavadora y cuatro camiones utilizando algún tipo de acelerante y luego percutaron al menos cinco disparos de grueso calibre hacia una vivienda, la cual en ese momento estaba sin moradores, evidenciando claramente la extrema violencia en el lugar.


Al lugar acudieron voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Ercilla, junto con personal de Carabineros de la Sexta Comisaría y de Control de Orden Público (COP), con el fin de evaluar la situación.


Además, se encontró un lienzo en el que la Resistencia Mapuche Malleco se adjudicó la autoría de este ataque, manifestando su rechazo a la Ley de Usurpación y a la liberación de condenados por delitos.


Claudio Araneda, dueño del recinto, conversó con El Contraste, dando a conocer su molestia e indignación ante lo ocurrido en la localidad que se ha visto envuelta en varios atentados.


“No somos una gran empresa forestal, no somos empresarios, aquí no le hicieron daño al gobierno, no le hicieron daño a un grupo forestal gigantesco, el daño se lo hicieron a una persona de esfuerzo, unas personas que toda una vida han luchado para tener algo y de la noche a la mañana que por una estupidez, no sé qué pensarán, destruyen un esfuerzo familiar de años”, explicó.


“Yo, cuando llegué acá, ya estaba todo en llamas, habían cuatro camiones en combustión, tratamos de apagar lo que más se pudo, porque acá no hay seguros de ninguna parte y después cuando se calmó todo empezamos a revisar, la casa tenía cinco impactos de bala”, agregó.


Lamentablemente, para el afectado, lo que está ocurriendo en la región de La Araucanía solo queda en querellas y el olvido, demostrando así la incapacidad de poder conllevar lo que está ocurriendo diariamente.


“Un atentado más que va a quedar en el archivo, aquí hay miedo, uno no le anda haciendo daño a nadie, uno está trabajando y no sé por qué aquí las empresas familiares sufren este tipo de cosas”, cerró.


Por ahora, quedó en manos de la Policía de Investigaciones, quienes realizaron el levantamiento de evidencias para poder tratar de dar con los responsables.

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