Un niño de 13 años murió la tarde de este sábado, mientras se bañaba en el río Biobío en el sector La Montaña de Santa Fe, en Los Ángeles.
El pequeño se encontraba disfrutando del agua, en medio de una jornada de altas temperaturas, momento en que se le perdió el rastro.
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Rápidamente la familia inició la búsqueda, sin embargo, en medio de la desesperación todo se tornó infructuoso. Rápidamente se activaron las alarmas de emergencia, que movlizaron a Carabineros y personal voluntario de Bomberos para su rastreo.
Junto con ello, se solicitó presencia urgente del Grupo de Operaciones Policiales Especiales – GOPE de Concepción para cooperar en la búsqueda.
Sin embargo, pese a los esfuerzos de las unidades de emergencia y la comunidad, el pequeño apareció muerto.
Se trata de una nueva víctima de la temporada estival, que se transforma en el cuarto deceso por inmersión desde diciembre en adelante. Por lo anterior, las autoridades extremaron los llamados a la comunidad para nunca quitar los ojos de los menores mientras disfrutan del agua. Junto con ello, mantener siempre cerca los teléfonos de emergencia y preferir lugares que cuenten con salvavidas.
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