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3,2 millones de toneladas de fruta chilena -por USD 8.021 millones FOB– se exportaron en 2023 según ODEPA, un volumen impresionante que subraya la importancia de la industria frutícola chilena en el escenario global. Una expansión internacional que conlleva un desafío significativo: el riesgo de cambio de divisas.

Las fluctuaciones en los tipos de cambio pueden impactar los márgenes de los exportadores, convirtiendo rápidamente una operación rentable en una pérdida. Para combatir este riesgo, es crucial implementar una estrategia efectiva de gestión del riesgo de cambio de divisas que se complemente con sistemas de manejo de saldos en divisas y pagos (Cash Management Global). En este contexto, las soluciones tecnológicas, especialmente las APIs (siglas en inglés de Interfaces de Programación de Aplicaciones) y las cuentas de recaudación global, están emergiendo como herramientas vitales a la hora de hacer más eficiente las operaciones de tesorería de una empresa.

Las APIs permiten a los exportadores conectar sus ERP corporativos para acceder a datos en tiempo real sobre tipos de cambio, pagos y saldos en cuenta, proporcionando información crítica para tomar decisiones informadas. Además, estas herramientas pueden automatizar procesos financieros, ahorrando tiempo y recursos valiosos.

Por otro lado, las cuentas de recaudación global ofrecen a los exportadores la posibilidad de recibir pagos en múltiples divisas, simplificando las transacciones internacionales y reduciendo la exposición al riesgo de cambio de divisas. Estas cuentas también permiten mantener los fondos en la moneda original hasta que sea conveniente convertirlos, proporcionando una capa adicional de protección contra las fluctuaciones de los tipos de cambio.

A medida que avanzamos hacia el futuro de las finanzas transaccionales globales, la volatilidad del mercado de divisas probablemente continuará, subrayando la importancia de estas herramientas. Los exportadores que cuentan con una estrategia sólida de gestión del riesgo de cambio de divisas y utilizan tecnologías como las APIs y las cuentas de recaudación global estarán mejor equipados para proteger sus márgenes.

En conclusión, en un mundo globalizado donde las fluctuaciones de las monedas son la norma, la gestión del riesgo de cambio de divisas y el manejo eficiente de saldos y pagos, será fundamental para la industria frutícola chilena. Gracias a las soluciones tecnológicas disponibles, los exportadores pueden mitigar este riesgo y asegurar la rentabilidad de sus negocios en 2024 y más allá.

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