Este lunes será una jornada clave en relación al caso del malabarista Francisco Martínez, quien murió baleado por un funcionario de carabineros en lo que fue un polémico control de identidad.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes en la comuna de Panguipulli, Región de Los Ríos, en una concurrida calle. De acuerdo a los primeros antecedentes, el artista callejero se negó a mostrar su carnet de identidad por lo que la discusión fue escalando en intensidad.
Así fue como el funcionario realizó dos disparos contra el cuerpo de Francisco, quien se abalanzó contra él, recibiendo tres impactos más que le costaron la vida. Desde la institución remarcan que fue por legítima defensa, debido a que estaba con unos machetes.
Estos objetos fueron entregados por la hermana del fallecido a la Policía de Investigaciones, quienes se encargarán de las pericias correspondientes. Se trataría de machetes de utilería que no tienen filo, pero que pueden herir.
Inmediatamente se comenzaron a registrar protestas e incidentes en diversos puntos del país, incluyendo la quema total de la municipalidad de Panguipulli y de diversos edificios del sector público de la ciudad.
En medio de este panorama, salió a la luz un nuevo registró del fatal suceso. Cámaras de seguridad que estaban frente a la intersección donde Francisco hacía malabares captaron todo el control de identidad.
Tras el primer disparo de advertencia, el malabarista se esconde detrás de unas plantas y una caja de electricidad, mientras es rodeado por dos funcionarios. Después vienen los dos disparos en los pies y toda la discusión que ya es conocida.
Cabe señalar que tras la recopilación de antecedentes, el fiscal del caso, Marcelo Leal, fijó para este lunes la audiencia de formalización del funcionario, quien estuvo retenido en la Tenencia Los Jazmines de Valdivia.
