La Universidad Católica anunció que a partir del sábado 10 de octubre, comenzaría el reclutamiento de voluntarios para realizar ensayos clínicos con la vacuna contra el coronavirus.
Se trata de un antídoto que llega desde el país de origen de la pandemia. La Farmacéutica china Sinovac Biotech administrará 3 mil vacunas a chilenos a fin de año.
Ignacio Sánchez, rector de la PUC, detalló a La Segunda que trabajaran en 8 centros a lo largo del país (desde Antofagasta a Valdivia), reclutando a voluntarios de entre 18 y 60 años, que no tengan enfermedades crónicas.
Sobre el último punto, argumentó que «queremos hacer el estudio en población sana. Una vez que estos estudios estén listos y parta la vacunación para todos, se priorizará a la población con mayores factores de riesgo».
En la misma línea, remarcó que estas pruebas no serán exclusivas, pero se van a priorizar a trabajadores de la salud, ya que están más expuestos al contagio.
Además, los voluntarios dispondrán de un seguro de salud y el pago de transporte y alimentación, pero no recibirán remuneración.
Sobre la vacuna y su testeo, el rector detalló que «el seguimiento clínico a los voluntarios se hace por más de un año para ver efectos adversos, y se les hará un seguimiento clínico bien estricto que está establecido en los protocolos».