¿Qué pasaría si se retoma el año académico? Esa pregunta se realizaron una serie de expertos convocados por las comisiones de Salud y de Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación del Senado, que desde la semana pasada vienen revisando las distintas medidas que ha adoptado la autoridad sanitaria para contener el brote de Coronavirus (COVID 19) en el país.
En esta nueva cita vía teleconferencia, los senadores Carolina Goic, Guido Girardi, Francisco Chahuán, Juan Antonio Coloma y Luz Ebensperger conocieron el parecer de los expertos del mundo académico y de la ciencia respecto de dos temas principalmente: las consecuencias que tendría reabrir los colegios y la veracidad de los datos entregados por el Minsal.
Durante el debate intervinieron más de una decena de expertos y los miembros del Consejo Asesor del Minsal por COVID-19, además de académicos y profesionales de las áreas de la salud y educación.
¿VUELTA A CLASES?
La polémica por la vuelta a clases surgió al principio de la sesión cuando la doctora Aguilera y el doctor Vial comentaron que en la última reunión del Consejo Asesor del Minsal por COVID-19, el Minsal hizo algunas preguntas, entre ellas, respecto del uso de mascarillas, el cierre de la cuarentena en establecimientos educacionales, los criterios de entrada y salida del aislamiento social, y el uso de test alternativos a la PCR.
Los expertos coincidieron en que no es buena idea reabrir los colegios porque aún no pasa lo peor del brote que se relacionará con el invierno y el hacinamiento asociado. Al parecer, el Ejecutivo está testeando la posibilidad del retorno a clases al término de las adelantadas vacaciones de invierno. Éstas finalizan la última semana de abril, por lo que la pregunta sería si los niños y jóvenes pueden retomar el calendario desde los primeros días de mayo.
La médico especialista en Salud Pública, Ximena Aguilera explicó que “la idea de abrir las escuelas debe ir en concordancia de una tendencia clara que es la baja sostenida en el número de contagiados (positivos a test de PCR), la capacidad de testear casos sospechosos, garantizar la debida trazabilidad y que no exista estrés asistencial. Así las condiciones no están dadas”.
Se insistió en la pertinencia de tener protocolos claros no solo en cuanto a la entrada de localidades a una cuarentena obligatoria, sino también aquellos relacionados con una salida del aislamiento de manera gradual.
Desde el modelamiento matemático, el director del Centro de Modelamiento Matemático de la Universidad de Chile, Alejandro Maass, reconoció que “hemos mirado literatura comparada, como el caso de Australia. Allí se han aplicado modelos semi cuantitativos. Todo indica que las estrategias no funcionan si no se cumple con lo mínimo. La vuelta a clases no tiene efectos, si las personas no siguen las reglas básicas de autocuidado. Si el 80 o 90% de la población sí sigue las recomendaciones, reabrir los colegios no es un problema. Chile no es un caso viable”.
CUIDADO CON LAS CIFRAS
Esta reflexión viene de la mano con la denuncia que ha hecho personal del Minsal y de servicios de salud de diversas comunas del país, respecto a que las cifras diarias que se entregan no corresponden a la realidad. Al respecto, los expertos llamaron a ser cautos, argumentando que “no creemos que se nos esté mintiendo. Hay muchas formas de presentar los datos. No tienen el detalle que nos gustaría porque son muy agregados”.
En tal sentido la infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Jeannette Dabanch describió los problemas que tienen la toma de muestra que induce a errores. “Para hacer un examen adecuado se requieren tubos de muestra de 2 ml, pero se usan de 0,5 ml porque es lo que hay. Eso claramente incide. Los resultados que se dan positivos, están desfasados y muchos no se han procesado como se debe”, manifestó.
Desde la óptica del director social del Hogar de Cristo, Pablo Egenau, se hizo ver que se presentó al citado consejo asesor una minuta sobre las medidas críticas que deberían adoptarse pensando en la población vulnerable (personas en situación de calle, adultos mayores desvalidos y discapacitados mentales) “Éstas representan unas cinco mil personas, las cuales participan en 144 programas de residencia. Pedimos crear una mesa para apoyar a la gente vulnerable donde participen diversos actores”, expresó Egenau complementando que hasta ahora el virus ha estado focalizado en adultos de altos ingresos pero ahora se desplazará a comunas más populosas donde el hacinamiento es una realidad.
Frente a todo lo anterior, la Comisión acordó mandar una carta formal al Minsal –con un enfoque propositivo- para hacer ver la necesidad de contar con la mayor cantidad de datos desagregados, esto para ser usados como insumo de esta mesa que reúne legisladores y expertos.