El notario suplente, Pablo Gándara Riveros de la 2ª Notaría de Los Ángeles, fue formalizado por el delito de autenticar dos firmas que no correspondían a las personas que estaban suscribiendo contratos de compraventa de vehículos. Estos actos ocasionaron perjuicios significativos a los legítimos propietarios, afectando su patrimonio.
Según los antecedentes presentados por el fiscal Rodrigo Durán ante el tribunal, durante dos ocasiones específicas, el 18 de mayo de 2018 y el 16 de diciembre de 2019, el notario suplente, Pablo Gándara, incumplió su deber como ministro de fe al dar fe de la autenticidad de firmas que no pertenecían a los suscriptores reales de los contratos de venta de vehículos.
El fiscal Durán destacó que las personas perjudicadas nunca acudieron a la notaría ni rubricaron los documentos en cuestión. La Fiscalía presentó cargos contra Pablo Gándara por la reiterada infracción al artículo 443, inciso segundo, del Código Orgánico de Tribunales.
En el proceso, el persecutor resaltó la inexcusable negligencia del imputado al no haber ejercido su función con la integridad y altura que se espera de un auxiliar de la administración de justicia. Al no seguir los procedimientos establecidos para autenticar las firmas en documentos privados, Gándara no cumplió su misión de salvaguardar la fe pública en las transacciones comerciales en las que participó.
El imputado no quedó sujeto a medidas cautelares y el Juzgado de Garantía de Los Ángeles otorgó un plazo de tres meses a la Fiscalía para concluir la investigación correspondiente.
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