Conmoción causó la muerte de una bebé de 19 meses, quien murió de hambre por despreocupación de sus padres, que jugaban videojuegos.
A 14 meses de cárcel fue condenado un joven de 27 años, Identificado como Michael Conroy, tras declararse culpable por la muerte de su hija Kiera, de 19 meses, al despreocuparse de ella por jugar videojuegos.
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El Tribunal del Sheriff de Airdrie, Escocia, tomó esta decisión debido a que los antecedentes determinaron que la menor de edad murió por inanición, después pasar 21 horas sin comida cuando estaba bajo el cuidado de sus padres.
Quienes la ignoraban mientras jugaban videojuegos y veían televisión en su domicilio, ubicado en Coatbridge, North Lanarkshire, Reino Unido.
Por su parte, la madre de la niña, Kirsty Boyle, de 24 años, se declaró inocente y salió libre de cargos, según detalló el Daily Mail.
De acuerdo a la información entregada en el juicio, la pequeña sólo había comido cuatro nuggets de pollo y tallarines. La pareja se percató que estaba sin vida cuando decidieron salir a la calle y fueron hasta su habitación.
Las autoridades acusaron de negligencia a la pareja, cuya casa estaba en condiciones insalubres cuando llegó la policía.
La demanda contra Conroy destacó que «no le había proporcionado a Kiera la alimentación, y los líquidos adecuados y la había dejado sola y desatendida durante períodos excesivos y no le había proporcionado condiciones de vida adecuadas».
Y lamentablemente, por la inaceptable irresponsabilidad de sus propios padres, la pequeña murió de hambre.
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