Mark Bryan es un ingeniero en robótica estadounidense de 61 años que está casado, tiene tres hijos y cada día suma más seguidores en sus redes sociales.
Esto luego de que iniciara una cruzada para romper estereotipos y demostrarle al mundo que la ropa no tiene género.
Ya son cuatro años en que este profesional usa tacones, faldas y vestidos para ir a su trabajo. A través de su Instagram, comparte todos los looks diario con sus más de 160 mil seguidores.
Además, se define como «un tipo promedio, heterosexual y felizmente casado. Amo a las mujeres hermosas, los Porsches, y solo quiero incorporar una falda y unos tacones en mi vestuario diario».
Su estilo se define con una ‘parte masculina’ de la cintura para arriba, con faldas y tacones, ya que son más fáciles de combinar.
Hasta el momento son más los elogios que las críticas, aunque Bryan señaló que a veces se enoja cuando le preguntan si es heterosexual: «¿Me harías la misma pregunta si estuviera usando pantalones?