Daniela Aránguiz entregó detalles de cómo han sido su reciente visita a Jorge Valdivia en la cárcel de Rancagua y expuso la actual situación del ex futbolista.
En la víspera de Navidad y Año Nuevo, la ex Mekano fue captada en el recinto penitenciario visitándonoslo a su ex esposo, quien se encuentra en prisión preventiva tras ser denunciado por dos delitos de violación.
En el programa “Sígueme”, la panelista habló sobre el reencuentro que tuvo con Valdivia y señaló que “yo soy súper transparente para decir las cosas. Voy a ir, porque quiero ir no más, no tengo que dar ninguna explicación. Son fechas súper importantes. Siento que es mi deber como familia”.
“Me topé con un periodista, lo tuve que defender un poco, ojalá que en Primer Plano lo digan… Es que es súper difícil que un periodista de espectáculos vaya a un lugar donde no está acostumbrado”, añadió.
Bajo esa misma línea, Aránguiz mencionó que tras acudir al lugar “me he dado cuenta que tengo mucho cariño de la gente y se los agradezco a todos… Cuando iba saliendo del lugar, había un periodista y le dije ‘no te voy a hablar’. Entonces la gente empezó a defenderme y el periodista se asustó un poco”.
Por otro lado, la ex esposa del deportista comentó que una de las señoras que se encontraba en la fila para las visitas “me dijo que nadie está libre de que puedan pasar por esto y no tienen que sentir vergüenza por ir a visitar a alguien que quizás hizo o está en una investigación que ustedes no tienen nada que ver. Ojalá que no tenga que seguir yendo. Espero que no tenga que seguir ahí”.
“Jorge es el padre de mis hijos y va a ser mi familia hasta que me muera, así que voy a estar ahí apoyándolo. Quizás sea algo súper significativo que, para una fecha tan importante, lo mínimo que puedes hacer es llevarle ponte tú una cena. Y que él comparta con gente que lo quiere de verdad, porque yo siempre lo he dicho, que yo a Jorge lo quiero y lo voy a querer toda mi vida”, manifestó.
Respecto a su conversación con Valdivia, la panelista detalló que “no lo veo bien obviamente. Yo creo que nadie puede estar bien en esa situación así de difícil. No está pasándolo bien. No es que se haya acostumbrado a estar ahí. Yo creo que es un lugar al que nadie se acostumbra, jamás. Y por eso es que lo voy a apoyar hasta que esto se resuelva. Sí se demuestra cariño, amor, hay abrazos bonitos. Jorge es una persona a la que le cuesta mucho llorar con la gente y cuando me ve a mí, llora conmigo. Y le voy a prestar mis brazos para poder sostenerlo”.
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