Una vez más, la violencia hace estragos en la Macrozona Sur con dos atentados incendiarios que se desataron durante la mañana del jueves, dejando un saldo de tres vehículos de gran tonelaje destruidos.


El primero de estos lamentables sucesos tuvo lugar a las 06:30 horas en el kilómetro 559 de la Ruta 5 Sur, en el área conocida como Esperanza.

En esta ocasión, un grupo de individuos encapuchados interceptó un camión y un minibús, empleando armamento de gran calibre para intimidar a sus ocupantes.


Acto seguido, procedieron a prender fuego a ambos vehículos antes de escapar del lugar, efectuando disparos al aire mientras se alejaban en una dirección desconocida. Este acto de violencia fue capturado en video por varios conductores que transitaban por el lugar en ese momento.


Minutos después, a las 06:42 horas, se reportó un segundo ataque en la Ruta R-23, que conduce a Huapitrío. En esta ocasión, la modalidad empleada fue similar a la del atentado previo.


Cuatro individuos encapuchados interceptaron un bus que transportaba trabajadores. Utilizando algún tipo de acelerante, incendiaron el vehículo y aprovecharon la oscuridad del lugar para escapar.


En ambos casos, personal de Carabineros y Control de Orden Público se movilizó para asegurar los lugares, además voluntarios de Bomberos también se presentaron para controlar y extinguir las llamas. Por fortuna, no se reportaron personas heridas como resultado de estos violentos actos.


Desde Carabineros, se informó que en la ruta que conecta Collipulli con Angol, desconocidos derribaron postes del tendido eléctrico, provocando un corte en el suministro eléctrico que afectó una amplia zona.


Lamentablemente, como ha sido la tónica en casos anteriores, no se han realizado detenciones en relación a estos hechos. En uno de los ataques se encontraron pancartas que hacen alusión a la causa mapuche, acentuando así el contexto en el que se desarrollaron estos incidentes.

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