El pasado 11 de marzo, la ciudad de Cabrero celebró los 112 años de vida de Flor Valdebenito, con lo que se transformaba en la mujer más longeva del país.
Sin embargo, se informó que durante la jornada del domingo y por causas naturales, finalmente dejó de existir.
La mujer estaba totalmente lúcida y era visitada mensualmente por personal médico del Cesfam de Monte Águila en su casa donde era cuidada por su hijo Rubén.
El alcalde de la comuna de Cabrero, Mario Gierke, manifestó su impacto por la triste noticia.
«Expreso mis condolencias a su hijo Rubén, quien se dedicó a cuidar a su madre, ahí en su hogar en el sector Coihuico Sur, muy cerca de donde ella había nacido, junto al puente Las Obras», indicó.
Agregó que «tuve el agrado de conocerla, visitarla compartir agradables momentos con Florcita. Con nuestros funcionarios municipales estuvimos celebrando sus más recientes cumpleaños, cuando ella se alegraba mucho, porque nunca perdió la lucidez».
En su juventud, Flor Valdebenito fue empleada doméstica en Santiago, donde nació su hijo. De regreso en su comuna, vivió tranquilamente hasta el domingo, donde disfrutaba de su pequeño campo y escuchaba sus rancheras, que tanto le gustaban.
Sus cercanos aseguran que era muy creyente en Dios y tenía un sencillo espíritu pleno de esperanza. «Hoy ha partido a un merecido descanso, en su último viaje», dijo Gierke.