El pasado 12 de agosto, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, promulgó la ley que busca eliminar la contaminación visual que generan los cables en desuso y que a la vez exponen la seguridad de las personas.
La nueva normativa, establece que si las compañías de telecomunicaciones no retiran el tendido se enfrentan a multas que pueden llegar a los más de 49 millones de pesos.
Sobre este tema, el alcalde de Los Ángeles, Esteban Krause, indicó que «la misma ley dice que hay un plazo de tres meses para dictarse un instructivo, entonces, una vez que lo tengamos, vamos a poner inmediatamente (la ley) en práctica».
«Yo creo que todos los municipios de Chile estábamos esperando. Hay que ver como opera la normativa y estamos revisando todos los días que llegue este instructivo para terminar con esto y poder aplicarla. Esperamos también que las empresas puedan actuar con responsabilidad y celeridad».
Cabe indicar que una vez que los municipios reciban este documento que les permita fiscalizar y aplicar la legislación, los cables en desuso serán calificados como desechos. Una vez que esto ocurra, la empresa deberá retirarlos en un plazo máximo de 5 meses.
Algunos especialistas, han indicado que la tardanza en normar esta medida, provocará que el cambio se note recién después de 10 años.
