La presidenta de la Corporación para la Defensa del Patrimonio Ambiental y Cultural de Los Ángeles (Codepala), Nivia Riquelme, junto a la dirigente Wilma Mellado, lideraron una protesta enérgica contra la tala de los tilos que se están llevando a cabo en la Plaza de Armas de Los Ángeles. En un acto de resistencia, ambas mujeres se encadenaron a uno de los árboles para mostrar su descontento y detener la acción.
El alcalde de Los Ángeles, Esteban Krause, justificó la medida argumentando la necesidad de garantizar la seguridad de los ciudadanos y preservar las áreas verdes de la comuna. Según el jefe comunal, los árboles que están siendo talados representan un riesgo debido a su avanzada edad y condiciones fitosanitarias. El alcalde aseguró que se ha trabajado con especialistas, como ingenieros forestales, quienes han avalado la necesidad de la intervención en los ejemplares identificados.
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Sin embargo, Nivia Riquelme expresó su indignación por la decisión y acusó al alcalde de actuar de manera terca y negligente. Recordó la movilización realizada en el verano pasado, donde lograron recolectar más de 10,000 firmas en defensa de los árboles de la calle Ercilla, resaltando su importancia como pulmones verdes en la ciudad.
«Nuestra labor en verano fue concientizar a las personas sobre la importancia de preservar los preciosos y maravillosos árboles de la calle Ercilla, que son un verdadero pulmón verde. Esta medida del alcalde es una tozudez, como él mismo reconoce en los medios de prensa», afirmó Nivia Riquelme.
Además, criticó la gestión del alcalde en la restauración del edificio O’Higgins y la destrucción del patrimonio arquitectónico: «En el edificio O’Higgins perdió más de 1300 millones de pesos al demolerlo y luego restaurarlo. Han construido un nuevo edificio dentro de lo que era una joya arquitectónica de 1930. Es lamentable la destrucción de nuestro patrimonio».
Por su parte, el alcalde Esteban Krause reiteró su posición y argumentó que la tala de árboles se realiza con base en informes técnicos que respaldan la necesidad de intervenir los ejemplares identificados:
«Todos los árboles que hemos detectado y que debemos someter a una intervención, ya sea poda o tala del ejemplar, tienen un informe de un especialista, de un ingeniero forestal, que avala la condición sanitaria de ese árbol. Nosotros no emitimos una orden de corta si es que no tenemos detrás ese informe, que certifica que ese ejemplar tiene una situación fitosanitaria de riesgo para la infraestructura pública y privada», cerró Krause.
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