Como cada fin de semana, decenas de personas fueron detenidas por participar en fiestas clandestinas. Mientras más de 15 millones de chilenos atraviesan un estricto confinamiento, aun hay inconscientes que empañan todo el esfuerzo colectivo para combatir una de las etapas más duras de la pandemia en el país.
Lo que más llamó la atención fueron dos hechos en particular donde estuvieron involucrados funcionarios públicos; el fiscal Pedro Pinochet, perteneciente a la fiscalía Metropolitana Sur, fue detenido junto a nueve personas más en una fiesta clandestina.
También en la Región Metropolitana, un teniente coronel junto a dos oficiales de carabineros fueron detenidos en un evento de las mismas características. Lo más insólito vendría después, ya que comenzaron a insultar al funcionario a cargo del procedimiento.
Durante el tradicional balance del Minsal con respecto a la pandemia, la autoridad sanitaria fue consultada por estos episodios , remarcando que ‘nos preocupa muchísimo y hay que enviar una señal para evitar que se repitan estas situaciones’.
La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, señaló que «Nada ni nadie está por sobre la ley. Nos parece intolerable que ocurran estos hechos y sobre todo esta indolencia, porque todos los días hemos venido diciendo que estas situaciones particulares son donde se pueden registrar contagios».
«Las personas que tienen algún rol directivoo de autoridad son las que más tienen que actuar con el ejemplo. Como ministerio de Salud estamos tomando todas las medidas, como sumarios sanitarios y obviamente vamos a tomar todas las atribuciones que nos da la ley», agregó la autoridad.
Siguiendo dicha línea, remarcó que «tienen que terminar estas indolencias frente a la situación sanitaria en el país. Son pocos, pero estos ejemplos son dramáticos porque ponen en riesgo la salud de las personas».
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