En el cruce norte de la comuna de Los Ángeles, específicamente donde comienza la avenida Sor Vicenta, existe una virgen que le da la bienvenida y despedida a los conductores, la cual esconde una interesante historia.
Hace aproximadamente cuarenta años, al salir o ingresar a la capital provincial de Biobío, por el sector norte, se encontraba una estatua de la Virgen María que se erigía majestuosa en la intersección de la carretera Panamericana y la calle “del Avellano”, hoy conocida como la Avenida Sor Vicenta.
Este ícono religioso, aunque su fecha de instalación es incierta, es testigo de la evolución de la ciudad y, según estimaciones, tiene al menos medio siglo o más de historia. Pero ha sido un punto importante en la historia de nuestra ciudad y que da la bienvenida o despedida de quien transita por el lugar.
La iniciativa para la instalación de esta imagen celestial fue liderada por el sacerdote italiano Pedro Sordini, quien pertenecía a la Iglesia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de la Congregación de Don Luis Orione. Con los brazos abiertos y una corona de estrellas, la Virgen miraba hacia la ciudad, recibiendo a los viajeros que llegaban y despidiendo a aquellos que partían.
Aunque existen diversas teorías sobre el significado de su ubicación, algunos creen que la estatua representa el nombre original de la ciudad, “Santa María de Los Ángeles”, aunque esta denominación no es la oficial, según cuenta la fanpage “Patrimonio Fotográfico de Los Ángeles”.
Una historia unida a Los Ángeles
Sin embargo, es cierto que la Diócesis de Los Ángeles lleva ese nombre, otorgado por el Papa San Juan XXIII el 20 de junio de 1959. Otros sugieren que la imagen se colocó en ese lugar para velar por la seguridad de los conductores y prevenir accidentes, ya que la zona era propensa a incidentes viales.
Incluso tenía una placa «Santa María de Los Ángeles, a su madre la Virgen María en el 25 aniversario de fundación de su diócesis, 8 de diciembre de 1985».
A comienzos del siglo XXI, debido a la ampliación de la carretera y de la Avenida Sor Vicenta, la imagen se trasladó unos metros al oriente. Hasta el el inicio del camino que conduce a Cerro Colorado.
Sin embargo, hace unos siete años, la Virgen se retiró para su restauración y llevada a la Iglesia que la resguarda. Desde entonces, han circulado rumores de que la imagen original no regresó al cruce y que, en su lugar, se instaló una réplica, mientras que la auténtica estaría en el Hogar de Ancianos “Don Orione”.
Una fotografía de la década de 1970 capturó la presencia de la Virgen en su ubicación original, siendo un recordatorio del legado histórico y espiritual que esta figura representa para la comunidad de Los Ángeles.
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