Una joven exponente de este deporte, que ha logrado ser una de las mejores y que va por más, así es la angelina que ha logrado destacarse a nivel nacional.

Vistiendo el número 17 del club Cubla, Trinidad Veloso López, de la categoría sub 14 infantil, ha logrado demostrar que en Los Ángeles y especialmente en el Liceo Alemán, el deporte se lleva en la sangre.

“Me costó mucho llegar aquí, pero cuando llegué fue un enamoramiento a primera vista, cada taller y jugada, el deporte colectivo, la unión en el equipo fue hermoso, fue maravilloso, ver que íbamos creciendo todas juntas, cada una se iba mostrando de a poco”, señaló a El Contraste.

Claramente, para cada deportista, el apoyo de la familia es lo primordial, tomando en consideración que es la base fundamental de cada trayectoria en las disciplinas en las que uno se desarrolla.

En este tema, Veloso comentó que “mis papás me han estado apoyando siempre al 100%, las 24 horas del día y los siete días de la semana han estado conmigo; incluso siempre llegan y vienen con su bombo y todo, el papá que siempre anda gritando con la mamá, son mis papás, siempre apoyando con la barra”.

«En este momento, mi hermano se acaba de incorporar al balonmano como portero en infantil, se llama Arturo Veloso, y mi hermana está yendo al gimnasio”, agregó.

Sobre el futuro, esta joven deportista manifestó que “me encantaría llegar lejos en esto del Balonmano, ser bien reconocida en todos lados, destacar mi nombre y mi apellido por mi familia y salir lejos, ganar una beca e ir a la universidad que quiero, hasta el momento no he visto mucho, me gustaría si llegar a ser mucho más y muy reconocida”.

«En el colegio me ha ido súper bien, he estado poniéndole siempre empeño y dar lo mejor de mí, de hecho, en lo deportivo como en lo escolar, y me gustaría estudiar medicina, como traumatología, ya que siempre hago deporte, entonces me enfocaría en eso”, recalcó.

«Yo quiero ir mucho más allá, he llegado a ser seleccionada nacional, pero este año nos fijamos hasta ahí, no fui al sudamericano, pero estuve en la preselección y estuve entrenando con ellos y la experiencia fue genial, más que la presión, fueron los nervios; después ya me fui uniendo y todo bien”, enfatizó.

En relación al equipo, han logrado demostrar que siempre la vista es llegar a lo más alto, siempre pensando en quedarse con el primer lugar.

Finalmente, Trinidad entregó un agradecimiento muy especial “yo quiero agradecer a mis papás, a mi equipo, a mi profesor, Raúl Neira, que siempre ha estado ahí apoyando al equipo y mis papás que son los mejores que están ahí y todos los días conmigo”.

«La clave de todo esto es ser feliz, cambiar, disfrutar y siempre demostrar lo mejor de ti”, cerró.

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