Será un amplio operativo que durará un poco más de un año, donde se deportará a una gran cantidad de migrantes en medio de un caos que está sucediendo en Chile, con el aumento de la delincuencia y hechos de gran connotación que han llevado a crímenes nunca antes vistos.
Según lo dado a conocer desde el gobierno, se está alistando un plan que permitirá concretar la expulsión de más de 2600 migrantes, los cuales han ingresado a Chile de forma irregular o por pasos clandestinos.
Lo anterior, luego de dos reuniones en el Palacio de la Moneda, donde se determinó un perfil de riesgo, priorizando a aquellos que poseen antecedentes y edades entre 18 y 40 años, que no están registrados en el empadronamiento biométrico.
Por otro lado, desde la oposición se insiste en que deberían ser 12 mil los expulsados, donde ya está en curso una orden de abandonar el país, pero desde el Gobierno de Boric, han señalado que no es posible.
De esta manera, de lo que queda del año 2023, la cifra de expulsados deberá ser de 1000, la mayoría por vía judicial, mientras que ya se proyecta un presupuesto de 7.200 millones de pesos para que se ejecute la salida de 2400 migrantes ilegales.
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