Continúan las complicaciones a nivel nacional en materia laboral, tras darse a conocer que cientos de personas fueron desvinculadas de una de las empresas más grandes del país debido a una reestructuración.
La empresa en si es Arauco, la cual realizó la desvinculación de aproximadamente 300 trabajadores en diferentes plantas ubicadas a lo largo del país. Esta medida afectó a operadores de diversas áreas e incluso al sector de gerencia.
Según lo informado por la empresa, esta decisión se enmarca en una reestructuración en curso. La compañía contrató a una consultora global que llevó a cabo una revisión completa de la estructura administrativa y de operaciones, y en septiembre definirá la nueva forma de operar de Arauco.
Estos cambios se suman a la fusión que se llevará a cabo entre el área forestal y la división de celulosa de la empresa, lo que disminuirá la necesidad de empleados y trabajadores.
Los lugares principales donde se han producido estos despidos, con la posibilidad de que sigan aumentando, son las plantas de Constitución, San José de Mariquina, Nueva Aldea y Horcones, además de las oficinas en Santiago y Concepción.
Otro aspecto preocupante es el cierre definitivo de la planta de celulosa ubicada en Licantén, en la región del Maule. Este cierre fue anunciado el 12 de septiembre de este año y ha dejado a 163 trabajadores y sus familias sin sustento, como también en el aserradero Horcones 2, en la comuna de Arauco, donde 90 funcionarios fueron despedidos.
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