La provincia de Biobío, es conocida por su belleza natural y riqueza cultural, pero también enfrenta un problema alarmante que ha estado en constante crecimiento en los últimos años: el suicidio y los intentos por quitarse la vida. Estas cifras, aunque dolorosas, nos instan a enfocarnos en la importancia de la salud mental y la necesidad de tomar medidas preventivas y de apoyo.

Un vistazo a las cifras

Para comprender la magnitud del problema, es esencial analizar las estadísticas disponibles, proporcionadas por el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) del Ministerio de Salud. Las tasas de suicidio en la provincia de Biobío desde 2019 hasta el primer semestre de 2023 son las siguientes:

  • 2019: La provincia registró 59 suicidios, con una tasa de 14,0 por cada 100,000 habitantes. Los Ángeles encabezó la lista con 31 suicidios, seguido de cerca por Antuco, con una sorprendente tasa de 23,3.
  • 2020: Las cifras disminuyeron a 45 suicidios, lo que representa una tasa de 10,6. Sin embargo, Antuco experimentó un aumento en su tasa a 23,2, mientras que Quilleco fue el más afectado, con una tasa alarmante de 39,9.
  • 2021: El año 2021 reportó 54 suicidios en la provincia, con una tasa de 12,7. El municipio de Alto Biobío lideró con una tasa de 73,6.
  • 2022: El 2022 marcó un aumento significativo con 70 suicidios y una tasa de 16,25. Nuevamente, Alto Biobío se destacó con una tasa de 29,5.
  • 2023 (primer semestre): Hasta el primer semestre de 2023, se han registrado 29 suicidios, lo que representa una tasa de 6,8. Las tasas varían entre las comunas, con Los Ángeles reportando 17 y Yumbel 4.

Al final del reportaje, podrás revisar las tablas por comunas.

Intentos de suicidio y desglose por edad y sexo

Los intentos de suicidio son igualmente preocupantes, ya que reflejan el sufrimiento de quienes luchan contra la idea de poner fin a sus vidas. En 2019, hubo un total de 352 intentos en la provincia de Biobío. Las cifras disminuyeron en 2020 y 2021 a 308 intentos en ambos años, pero aumentaron drásticamente a 597 en 2022.

Estos intentos no afectan por igual a todas las edades. Los adolescentes son especialmente vulnerables, con 255 intentos en 2022, mientras que las personas mayores de 60 años experimentaron 22 en ese mismo año.

En cuanto al género, las cifras demuestran una mayor vulnerabilidad en las mujeres. En 2019, se registraron 250 intentos femeninos frente a 102 masculinos. Estas diferencias se mantuvieron en los años siguientes, con un aumento significativo de las mujeres en su intención de poner fin a sus vidas en 2022, llegando a 469, en comparación con 127 en hombres.

Al final del reportaje, podrás revisar las tablas por sexo y edad.

El rol de la estacionalidad y la importancia de la prevención

Claudio Obando, psicólogo y gestor de Salud Mental del Servicio de Salud Biobío, arrojó luz sobre algunos factores detrás de estas cifras que pueden parecer inquietantes.

«El aumento en los intentos de suicidio es una tendencia observada no solo en Biobío, sino en todo el mundo durante los períodos de primavera y verano. Esto tiende a disminuir en invierno, pero esta época es cuando se centra más la atención en la prevención del suicidio», expresó.

Obando enfatizó que las causas del suicidio son multifactoriales y que, en muchos casos, están relacionadas con trastornos de salud mental, como la depresión. La estigmatización de los problemas de salud mental es un obstáculo que debe superarse, y «la atención profesional es esencial».

El profesional destacó la importancia de las redes de apoyo, como amigos y familiares, y mencionó el *4141, una línea gratuita de prevención de suicidios que ofrece orientación y asistencia las 24 horas del día, atendida por psicólogos.

Un llamado a la acción

Las cifras de suicidio e intentos de por poner fin a sus vidas en las personas de la provincia de Biobío son un recordatorio doloroso de la necesidad de abordar la salud mental de manera más efectiva. A medida que las tasas aumentan, es imperativo que la comunidad y las autoridades se unan en la promoción de la prevención, el apoyo y la atención adecuada.

«Las personas, cuando están cursando una conducta suicida, ya sea una ideación o intento, esta es catalogada como una urgencia. Entonces, la recomendación para las personas que llegan a estos servicios, es que se dirijan a los más óptimos, que son los hospitales de la familia y la comunidad o si no el Complejo Asistencial Dr. Víctor Ríos Ruiz, donde se les da prioridad luego de una evaluación médica y dependiendo del grado de severidad pasa a ser hospitalizada o se genera el nexo como unidad hacia el programa de Salud Mental del establecimiento donde la persona esté inscrita con atención de prioridad», detalló Claudio Obando.

Si alguien que conoces está luchando con pensamientos suicidas, no dudes en buscar ayuda. La estigmatización de la salud mental debe desaparecer, y el diálogo abierto y el acceso a servicios de atención son cruciales para prevenir más tragedias. La salud mental es un componente fundamental de nuestra vida, y debemos tratarla con la misma seriedad que cualquier otro problema de salud.

Tasas de suicidio provincia de Biobío (Documento descargable)

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