Este miércoles 15 de enero la Autoridad Sanitaria confirmó el primer caso de Hantavirus del año 2020 para la región del Biobío, correspondiente a una mujer de 35 años, residente de la comuna de Mulchén, que desarrolló actividades agrícolas en sectores rurales de la provincia del Biobío y la región de La Araucanía.
La paciente se encuentra hospitalizada en el Hospital Guillermo Grant Benavente de Concepción, con condición de gravedad, conectada a la técnica de ventilación mecánica extracorpórea ECMO y con aplicación de drogas vasoactivas.
Actualmente se investiga lugar de exposición debido a que la mujer realizó diversas actividades de riesgo, como paseos a Playa Colbún, Quilaco y Río Bureo, Mulchén; además de desmalezado en parcela de la comuna de Angol, región de La Araucanía.
“Lamentablemente se confirma el primer caso de Hantavirus del año en nuestra región, correspondiente a una mujer de 35 años, de Mulchén, que desarrolló actividades en sectores rurales de la provincia del Biobío y región de La Araucanía, razón por la cual se investiga actualmente el lugar exacto de exposición”, indicó el Seremi de Salud del Biobío, Héctor Muñoz.
Agregó que “ese contexto reiteramos el llamado a la población a adoptar medidas de prevención al vivir, trabajar o ir de paseo a sectores rurales, así como a consultar al médico si en el período de verano tienen síntomas de una gripe fuerte, con problemas respiratorios y siempre y cuando hayan realizado actividades en sectores rurales”.
Balance 2019
El año 2019, en tanto, la región concluyó con 7 casos de infección por Hantavirus, con 85,7% de casos masculinos y 14.3% femenino, con una mediana de edad de 42 años; una incidencia de 0,32 casos por cada 100 mil habitantes y una letalidad del 14,3%.
Por provincia, los casos se concentraron 4 en Biobío, 2 en Concepción y 1 en Arauco.
Por factor de riesgo, 28% tuvo exposición al virus por vivir en sector rural, 29% por realizar excursiones en sector rural y 43% por ser trabajador agrícola o forestal.
Medidas de Prevención Ambiental
Al interior de las viviendas las recomendaciones se orientan a sellar con materiales resistentes las aberturas por donde puedan ingresar roedores; eliminación de elementos que no se utilicen ya que pueden servir como refugio a los roedores; realizar una buena disposición de basura mediante contenedores cerrados con tapa; mantener alimentos almacenados en envases herméticos y no mantener restos de alimentos, incluidos los de mascotas, al alcance de los roedores.
Al exterior de las viviendas las sugerencias se centran en ventilar por 30 minutos lugares que permanecieron cerrados por mucho tiempo, abriendo puertas y ventanas, rociando con solución de cloro el lugar posteriormente para evitar la formación de aerosoles; mantener despejado, limpio y libre de elementos que sirvan de alimento o refugio para roedores todo el perímetro de la vivienda; desmalezar y mantener el pasto corto en un perímetro de 30 metros alrededor de la vivienda; y al igual que al interior del domicilio, disponer la basura en contenedores debidamente cerrados; manteniendo protegidas las fuentes de abastecimiento de agua; y las bodegas bien ventiladas y con una ubicación no menor a 30 metros de la vivienda.
En el campo y camping, transitar por senderos o caminos habilitados, sin internarse en lugares con vegetación abundante; evitar recolectar frutas silvestres o leña; acampar en lugares abiertos donde no existan evidencias de roedores; aplicar medidas de control de roedores dentro de faenas agrícolas, utilizar carpas con piso y enteramente selladas, limpiando el área donde se desea acampar, además de elegir siempre recintos autorizados.