Una nueva temporada de poda en modo Covid está por comenzar y los productores de arándanos y frambuesa de la zona ya alistan hasta los últimos detalles. Esto porque la seguridad para los trabajadores es lo primordial. Sin embargo, con un año de pandemia a cuestas, ya se saben las medidas a adoptar.
Francisco Novales, Presidente de Aproberries A.G. explicó el proceso 2021. «si bien todos los periodos tienen su complejidad, tenemos la experiencia del año pasado, que fue de mucho aprendizaje».
Según argumentó, el año anterior sabían que debían cuidar a los colaboradores haciéndoles charlas de inducción. También se les dijo cómo hacer el trabajo propiamente tal bajo la modalidad Covid, pero sin experiencia previa. El virus era algo nuevo para todos.
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Pero este 2021, la situación debería ser más fácil, gracias a lo aprendido y al equipamiento de los trabajadores. Sin embargo, está el riesgo al momento de hacer la poda en invierno. Esto porque el Covid se mezcla con los encierros en la casa. Ahí, aumenta la falta de ventilación por el frío y hay más humedad. Con ello, está la mezcla con otras enfermedades respiratorias que podrían complicar la situación.
Novales dijo sobre esto que “es súper importante tener una trazabilidad para cuando haya algún foco o un infectado. Esto para que podamos comunicarnos con la seremi de salud. Así tendremos un control exacto de nuestra gente desde el momento que entra a trabajar hasta el momento que se van”.
PTI Berries Biobío
Por su parte, el PTI Berries Biobío Centro, programa administrado por Codesser y cofinanciado por Corfo- durante todo el 2020 estuvo desarrollando actividades informativas y preventivas, además de acercar a los productores con distintas entidades públicas para estrechar relaciones.
Carlos Muñoz Sufán, gestor Técnico del PTI expresó la importancia del trabajo realizado. “Creo que hemos sido un aporte porque todas las actividades han sido definidas por los productores. El seminario fue direccionado a protocolos Covid. Ahí hablamos con expertos, la Seremi del Trabajo y de Salud, y todo fue planificado en función de aportar información a los productores de berries de la zona.”
Para esta etapa de poda, se espera operar con mayor normalidad, ya que también se necesita menos personal. Se estima durante el periodo de cosecha- en el verano- se trabajó con el 30% menos de cosechadoras, esto debido principalmente al temor entre ellos de contagiarse, según el presidente de Aproberries.
