Como Moisés Orellana fue identificado el joven que murió de un disparo en la cabeza durante un confuso incidente ocurrido la madrugada de este martes en Cañete.
Todo ocurrió tras un ataque incendiario que afectó a tres cabañas del sector Laguna Grande Lloncao. Los desconocidos se dieron a la fuga y se toparon con otro vehículo donde estaba compartiendo el joven junto a otros amigos.
Tras un altercado, presuntamente el grupo de desconocidos disparó contra el automóvil resultado el joven cañetino herido mortalmente.
Jorge Radonich, alcalde de Cañete, condenó los hechos y realizó un directo llamado al Gobierno para que restablezca el estado de derecho en la zona.
«Exijo al Gobierno que restablezca en la comuna de Cañete el derecho a vivir en paz», fueron las palabras de la autoridad.
Además, afirmó que Carabineros no tiene todos los medios para asegurar la zona ni mucho menos evitar hechos de violencia ya que tienen el 50% de sus autos operativos.
Por lo anterior, Radonich cuestionó que «¿Como podemos, en una zona como ésta, estar alertas si la fuerzas que deberían tener los elementos necesarios para recurrir en momentos de peligro no tiene los elementos adecuados?».